MANIFESTACIÓN Y MARCHA
CRÓNICAS DE MUERTES ANUNCIADAS
Lourdes tenía 20 años y su sueño era servir al prójimo. Su muerte se suma a otras que son “consecuencia de la construcción descontrolada”, expresan quienes no dudaron en movilizarse.
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| El mensaje de una manifestante |
Lourdes vivía en Villa Bosch (provincia de Buenos Aires) y entre el cúmulo de anhelos que seguramente tenía, estaba servir al prójimo, por eso estudiaba para ser agente de una fuerza de seguridad. Pero su vida quedó truncada. Desde ahora, la hija, hermana, nieta, prima y sobrina que perdió su familia ya no estará más fisicamente, su ausencia la sentirán también sus amigas y solo sobrevivirá en el recuerdo de quienes la amaron y en los imborrables momentos que compartieron con ella.
Lourdes no es la primera víctima de siniestros evitables en obras en construcción en la ciudad de Buenos Aires y no será la última, si se mantiene este statu quo.
Por eso, a la par que la noticia trascendió rápidamente, primero entre los residentes cercanos y luego en los medios de comunicación locales y de nivel nacional, también escaló la indignación y la bronca en los vecinos que se fueron informando de los detalles del hecho, fundamentalmente porque desde la comunidad cada vez son más las voces que insistentemente vienen advirtiendo irregularidades, negligencias de ciertos profesionales y empresas que no atienden las normas más básicas de seguridad, a lo que se suma la falta de controles por parte de funcionarios que no cumplen sus funciones.
El fin de semana largo y una mañana donde las altas temperaturas se hicieron sentir desde muy temprano no fueron óbice para que un conjunto de personas decidiera anteponer a cualquier otra actividad, la necesidad de manifestarse para exigir Justicia por Lourdes, reclamar mayores controles al Gobierno de la Ciudad y frenar los comportamientos negligentes de empresarios que no atienden las normas, porque la construcción descontrolada se está cobrando vidas inocentes.
Un poco después de las 11 horas comenzó el acto que abrió Sandra, integrante de la asamblea vecinal Conciencia Urbana Comuna 11. Ella sentenció “Esto es la crónica de una muerte anunciada porque lo venimos diciendo hace años. Las vecinas y los vecinos venimos diciéndole a legisladoras, a legisladores, a funcionarios, a las comunas, que esto iba a suceder y lamentablemente vuelve a suceder.” Y continuó “En todos los barrios tenemos casos como estos, de derrumbes (...) que no son accidentes porque se pueden evitar.”
Luego pidió: “Necesitamos que el Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, Clara Muzzio, se hagan cargo de este tema” para más adelante agregar “las empresas constructoras hacen lo que quieren, destruyen los barrios, no toman las medidas necesarias, no sabemos si conocen lo que es seguridad e higiene. Pero nosotros necesitamos que lo que no hagan las empresas constructoras para incrementar su rédito, el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, lo tiene que controlar.”
Y también se quejó: “Acá no veo a nadie, veo [solo] a una comunera -y gracias por venir-. El jefe de la comuna, bien gracias. No están acá, y deberían estar, legisladores, legisladoras, ninguno. Salen para la foto cuando tienen que darle el diploma por `el día de la abeja’ a una persona en la legislatura y acá no están. Acá tienen que estar las legisladoras y los legisladores que son los que votaron este código urbanístico de mierda.” Y siguió “Acá tenemos legisladores que viven en esta comuna. Tenemos a Del Gaiso [Coalición Cívica], tenemos a Villafruela (PRO), tenemos a otros que ya no me acuerdo el nombre [Velázquez y Grillo (Fuerza Patria) y Donati (Republicanos Unidos)] y tienen que estar acá, no sacándose fotos cuando tienen que dar un diploma a Sui Géneris. Eso no nos importa, no nos cambia la vida. Que se derrumbe una obra en construcción o saquen árboles si nos cambia la calidad de vida”.
Por último invitó a no quedarse de brazos cruzados: “Salgamos a las calles, reclamemos donde debemos, no en los chats, porque los chat no les llega a los funcionarios. Tenemos que salir a la calle, ir a la comuna, ir a la legislatura y ahí organizar, porque no sirve de nada decirlo por Instagram, poner un like, eso no suma. Tenemos que salir y decirle a los legisladores y legisladoras, primero que laburen más, porque solo tuvieron cinco sesiones este año. Eso estaría bárbaro. Y también que sancionen nuevamente el Código Urbanístico (…) No nos importa si lo sancionaron en diciembre de 2024, hace un año, bueno, que lo vuelvan a laburar, porque necesitamos que esto pare de una vez.”
Luego Gabriela, una vecina que tiene su casa en la misma manzana de la obra en construcción donde ocurrió el derrumbe de la estructura publicitaria alertó que ella quiso “hacer un montón de impedimentos para que frenaran semejante obra” pero “Nadie me escuchó. La máquina de impedir del gobierno de la ciudad siempre está atenta para eso.” Y siguió… “Como no tengo contactos políticos, no pude frenar nada.” Y pidió “necesitamos a los medios de comunicación porque ellos replican nuestro dolor.” Por último señaló que no le importa los daños materiales y rajaduras que esta obra produjo en su domicilio. que ya lleva excavados tres subsuelos sino que “La que importaba era Lourdes. Y lo que importa es que siempre tiene que haber una muerte para que se frene la construcción. Y ni así se frena.”
Esta vecina de Villa Devoto alertó que han modificado “la letra chica” de la normativa y ahora si una obra en construcción produce daños en los domicilios aledaños, la Agencia Gubernamental de Control ya no se ocupa y cada propietario debe contratar a un abogado y encarar un juicio si pretende un resarcimiento.
Finalmente, Alejandra subrayó “Hoy estamos reunidos por una vida que podía ser la de cualquier familia. Piensen que esa familia hoy va a tener una silla vacía para fin de año y por el resto de sus vidas. Tenemos que dejar de mirar para otro lado. No naturalicemos el horror”
Angélica de la organización “Basta de Mutilar Nuestros Árboles” también quiso transmitir un mensaje. Sus palabras fueron contundentes: “Estamos acá por Lourdes y por todas las víctimas (…). Esto no es inoperancia, es “operancia” para beneficio económico de unos pocos.” Y continuó: “Acá se gobierna y se legisla para el beneficio económico de unos pocos bolsillos y no para el bien común. Y eso se nota desde que lamentamos vidas, vidas perdidas, hasta cada árbol que perdemos. Porque no importa el buen vivir.”
Por último, una representante del Consejo Consultivo de la Comuna 13, advirtió que el Código Urbanístico que se sancionó en 2018 (y fue parcialmente modificado en 2024) no respetó la democracia participativa que debería haber incluido la consulta a los institutos consagrados en la Constitución de la Ciudad. La consejera enfatizó que a estas irregularidades sobrevinieron otras como fueron los más de ciento veinticinco “convenios urbanísticos”, que no son más que excepciones que permitieron sobre construcción en lugares donde el propio digesto establecía límites. Y finalizó diciendo “es hora que empecemos a exigir, de una vez por todas, que seamos nosotros, los ciudadanos, los que tenemos el derecho de participación y exigir un cambio en este código. Porque hoy es Lourdes, mañana son operarios, pero ya basta!. Basta de perder vidas. ¿Por qué siempre los pueblos tienen que perder a sus habitantes? Esas vidas no se pueden recuperar. Lo único que les interesa es el dinero.”
Concluidos los testimonios, los presentes marcharon hacia el lugar del siniestro y en el lugar terminaron el acto al grito de “asesinos, asesinos…”
Algo que llamó la atención de los manifestantes fue que las franjas de clausura no estuvieran cerrando los accesos. Por ejemplo, una esas tiras estaba caída sobre la vereda. Ante la inquietud de los presentes, los agentes de la Policía de la Ciudad que obran de custodia procedieron a volver a colocarlas en las puertas, con lo que les quedaba de pegamento.
Adrián Continiello Fanelo también
fue víctima de la imprevisión
RECUERDO Y HOMENAJE A OTRAS VÍCTIMAS:
fue víctima de la imprevisión
A lo largo del acto los manifestantes además de recordar a Lourdes, última víctima de un siniestro producido en una obra en construcción, también recordaron a personas que fallecieron o resultaron heridas en casos similares.
Sandra del grupo Conciencia Urbana hizo referencia a dos hermanos adultos mayores que murieron por el derrumbe de un PH ubicado en avenida Pedro Goyena (Flores), que era lindero a una obra en construcción (2024). También se refirió a los tres obreros heridos que el mes pasado se cobró el desmoronamiento de un obrador en un desarrollo que está haciendo esta misma empresa constructora en la esquina de Helguera y Simbrón (Villa del Parque), además de mencionar que el barrio se salvó milagrosamente de una voladura, cuando operarios de un edificio en obra (Simbrón y Cuenca) rompieron un caño maestro que obligó a evacuar dos manzanas a la redonda.
Por supuesto, es imposible olvidar a Norma Fanelo. Esta vecina de Villa Devoto y mamá de Adrián Continiello Fanelo, que durante años peregrinó por distintos ámbitos con un cartel que colgaba de su cuello con la foto de su hijo, pidiendo y exigiendo justicia. El 1º de abril de 2019 Adrian fue víctima fatal del derrumbe de parte del departamento que habitaba junto a su novia en el barrio San Cristóbal. Él estaba durmiendo la siesta cuando parte del edificio colapsó y lo sepultó a raíz de las irregularidades de una obra lindera. En el camino que transitó, Norma supo acompañar solidariamente a otras familias que atravesaron hechos de violencia de la misma naturaleza.
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