sábado, 14 de septiembre de 2024

EDUCATIVAS Y CULTURALES

RELATOS DE VILLA DEVOTO


AQUELLA SEMIFINAL INOLVIDABLE


Escribe: NORBERTO PEDRO MALAGUTI

Presidente de la Junta de Estudios Históricos de Villa Devoto. Vecino del barrio


Eduado Lettieri
Angelito vino a verme al almacén de mi viejo, estaba totalmente sacado y lo primero que me dijo: donde te metiste que hace dos días que te ando buscando?

- Para un cachito, que te pasa?
- Como nadie te dijo nada?
- De que me estás hablando?
- Del partido por la semifinal con el Ciclón de Migueletes.
- Si ya lo sé, y qué?
- Como no te enteraste, que a Pepe lo internaron con apendicitis en el Alvear.
- Uh, estamos jodidos nos quedamos sin arquero. Perdóname, y como anda Pepe’
- Por suerte la operación salió bien, pero tiene reposo para varias semanas.
- Que macana, y con la racha que veníamos de eliminar al Villa Piaggio y al Boquerón.
- Pero ellos vienen de golear al Extramuros, que vos sabes era el candidato. Encima ninguno de nosotros somos duchos en el arco.
- Y ahora qué hacemos? 
- Como que hacemos, Hay que conseguir un arquero urgente, pedazo de gilun.
- Haber, déjame pensar...
- Mira que no tenemos mucho tiempo.
- Si, Si, ya se, en mi laburo hay un pibe nuevo que dicen que es bueno, mañana le hablo.
- Vos lo vistes atajar?
- No, pero ya no hay otra.
- Bueno, esperemos que no sea un paquete, si ganamos pasamos a la firnal con el Renacimiento.

Y llego el domingo, nublada mañana, son casi la diez, hubo orden de que nadie saliera a bailar, nervios y curiosidad, todos pensando como atajara ese pibe.

Muchachos aquí vengo con mi compañero de laburo, Eduardo, que cubrirá los tres palos. Le puse énfasis, como si presentara a Pedernera, era para superar los nervios.

- Sos bueno, pregunto El Bocha
- Bueno, eso dicen.

Media hora después, ingresaba el Ciclón de Migueletes, encima agrandados, porque ya sabían que nuestro valuarte, Pepe, no cubriría la valla. Encima habían volteado a la Academia de Campaña y Franco.

Ingresamos, dando alaridos de ánimo, la idea era que no trataran de acercarse al área nuestra, que no era más que una raya marcada con lavandina y un poco de cal viva que muy pronto desaparecería en esa cancha polvorienta, allí al costado de la futura avenida General Paz, que parecía que nunca se iba a inaugurar.

Los primeros minutos fueron de tanteo, ambos nos cuidábamos bastante, muchos pases cortos, pocas gambetas y bastante patadones que el réferi parecía no ver.

Se rompió el equilibrio cuando el insider nuestro Carlos, le puso un pase milímetrico al forward Chuto, mote por los chutazos que metía, la agarro de sobre pique y saco un remate que se estrello en el ángulo del poste y el travesaño, el rebote llego casi al medio campo.

Todo parecía morir en esa forma, pero en un descuido el wing de ellos, que era muy veloz, dejo nuestro half en el camino, encaró al arco y saco un shot al ángulo.

El pibe pegó un salto, giró en el aire y desvió en forma increíble la pelota al córner.

Recobramos la respiración, y así nos fuimos en cero en el primer tiempo.

En el intervalo, nuestro Delegado Don Luis, nos increpa y en seco nos dice¨¨

- Que mierda les pasa, estamos pensando en el arco propio y no en el del contrario...
- Ahora nos mandamos al frente, que joder.

Debe haber sucedido lo mismo en el equipo contrario, que el segundo tiempo fue un ida y vuelta, llegamos varias veces, pero no se concretaban, hasta que El Chuto recibió un pase largo, la adelanto para acomodarla y saco un cañonazo infernal que el arquero ni la vio.

- GOL; GOOOOL, nos pusimos 1 a 0, festejos y a reanudar.

Se nos vinieron encima, estaban hecho una furia, nos pelotearon de todos lados, no los podíamos parar, y allí Eduardo nuestro imprevisto arquero las paraba todas, arriba, abajo, de lejos de cerca, fue el héroe de la jornada.

Faltaban tres interminables minutos, robé una pelota, me mandé hasta el medio campo, estaban desarmados, eludí al último defensor y encaré, eludó al arquero y se me colgó de la cintura.

- Penal, Penal, grito la multitud y el Inglés, como le decían al réferi, no pudo dejar de sancionarlo.

La acomodó el Chuto, para que el tiento de la pelota no le molestara, le apunto a la cabeza al guardameta, y este se agacho sino iba a parar al hospital, a acompañar a Pepe.

- GOOOOOOOOOL, y allí prácticamente se acabo el partido, algún intercambio de empujones mutuos y pensar en enfrentar al Rena.

Nuestras camisetas blancas se volvieron color tierra de los revolcones, saltos de festejos.

Todos al serenarnos, fuimos a felicitar al pibe por su desempeño, cuando de pronto se acercó un señor con pinta de importante, se identificó y agregó:

-  soy buscador de cracks y represento a River Plate. Se acerca a Eduardo y le preguntó
- Cómo te llamas?
- Eduardo, señor.
- Eduardo cuanto?
- Eduardo Antonio Lettieri (*)
- Bueno, tomá esta tarjeta, y venirte con tu padre a verme, que te queremos probar.

Ese fue uno de los últimos partidos en esas canchas, la General Motors instalaría después su inmensa fábrica.

(*) Eduardo Lettieri jugó en la primera de River Plate

No hay comentarios:

Publicar un comentario